Cusco, la antigua capital del imperio Inca y el indiscutido centro arqueológico de la actualidad en América, brilla majestuosa desde su escondite en el alto valle de los Andes peruanos. Una verdadera joya en la deslumbrante corona del país. Quienes planificaron la ciudad inca escogieron el cuerpo de un puma para bosquejar esta ciudad extraordinariamente bien preservada. Es un placer absoluto encontrarse con arquitectura muy bien preservada y tallada a partir de la más fina piedra.

Callejuelas sombreadas de canto rodado desembocan en plazas flanqueadas por pasarelas de columnas donde indígenas con vestimentas coloridas venden sus artesanías y se pasean con sus llamas para la foto con los viajeros: la combinación de la sorprendente arquitectura y la colorida vida diaria hacen de Cusco una de las ciudades más bonitas de América. A pesar de que su ubicación es inmejorable si se quiere explorar la región –muy cerca del frondoso valle de Urubamba ("sagrado" en quechua), el icónico Machu Pichu o los pueblos indígenas de Moras y Moray–, Cusco merece su atención al menos algunos días.

Es una de las ciudades más visitadas de Perú y ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, por lo cual está bellamente preservada y preparada para recibir al turismo, pero no pierde su encanto único. Está llena de preciosas boutiques y hoteles elegantes, pero así y todo, cautiva con su autenticidad. Perderse entre catedrales ornamentadas, templos incas y deteriorados muros de piedra mientras mujeres con sombreros en forma de hongo y con tradicionales faldas coloridas tratan de venderle sus artesanías contribuye a unas vacaciones encantadoras, ya sea una escapada de fin de semana o como relax después de una gran aventura.

Tome un tour y recorra las bonitas calles empedradas de Cusco diseñadas para andar a pie; todo se encuentra a una distancia razonable de la Plaza de Armas. Una vez que haya sacado la foto en las arcadas entre los puestos de postales o después de una relajante comida en algunos de los excelentes restaurantes de la ciudad, visite el sitio inca de Sacsayhuaman, el cual mira hacia la ciudad con una colección impresionante de piedras gigantes sorprendentemente colocadas allí por los antiguos incas.